-¿Cómo se viven estos días de receso?
-Planificando lo que viene, armando el rompecabezas que significa la refundación del equipo, con la mente puesta en que en 2018 podamos mejorar las cosas y tener la cuota de suerte que nos faltó en la primera parte del torneo. Pero sobre todo mejorar, porque somos conscientes que no hemos tenido un buen arranque.
-Tras la gira por Neuquén se decidió el corte de Parker y la llegada de Chiera. ¿Cuáles fueron las razones?
-A Chiera lo veníamos siguiendo con la dirigencia y decidimos sumarlo porque necesitábamos cambiar un poco lo que nos venía dando Parker que, si bien tenía un muy buen tiro externo, su juego era algo limitado porque defensivamente daba muchas ventajas y en la parte ofensiva no tenía la fuerza para postearse ni la velocidad para romper. De todas formas, estamos muy agradecidos con lo que nos dio Parker, que demostró ser un gran profesional. Chiera creemos que puede cumplir la cuota de compromiso que tienen los jugadores nacionales respecto a los extranjeros que les lleva un tiempo de adaptación a la Liga, que tiene mucho roce y de visitante cuesta mucho jugar.
-¿Considerás que la posición en la tabla es la que merece el equipo?
-Para ser honesto, considero que de los 11 partidos que perdimos pudimos haber ganado 2 de local, contra Villa Mitre y Temperley. El primero lo perdimos en suplementario y el segundo sobre el final, en el partido posterior a la salida de Fanhbulleh. En los demás fuimos competitivos con todos menos con Temperley de visitante, pero creo que en el balance los hemos perdido bien. Con esos triunfos y el arrastre de puntos, si bien hoy estaríamos en una posición parecida, tendríamos un poco más de confianza.
-Notamos que en los primeros partidos a algunos jugadores les costó acoplarse al equipo y a la categoría en las primeras fechas. ¿Pensás que fue así?
-Considero que sí. Crotti y Fraga venían de otra categoría y Picton de la misma pero cumpliendo otro rol. Como todos necesitaban tiempo para poder ensamblarse, ellos conmigo y yo con ellos, y también con los extranjeros. Algunos equipos logran antes esa química y nosotros, al no poder ganar, fueron algunos momentos de dudas. Creo que ahora pudimos retomar la senda de la victoria y generar la confianza que todos necesitaban. Los cambios que hicimos fueron productivos, dejamos mejores síntomas en los últimos partidos y eso cambió nuestra cabeza. Vamos a arrancar con el desafío de hacernos fuertes de local, teniendo en cuenta la cantidad de partidos (5) que tenemos en casa en enero. Una parte mala pasó, lo mejor está por venir.
-¿Qué análisis hacés de los primeros partidos de Evans?
-Nick se adaptó rápido y bien al grupo. Tuvo la suerte que en el primer partido se ganó de local, la gente lo apoyó y los compañeros también. Tuvo una gran predisposición para ayudar y eso es lo que buscábamos, un jugador de equipo y no un goleador. El primer partido lo hizo bien, aunque en Neuquén en los dos partidos se cargó rápido de faltas. Dejó muy buenas sensaciones y esperamos que su rendimiento siga en alza para ayudarnos a ganar. Tiene un carácter fuerte y contagia, eso es importante. No vamos a estar tan pendientes de hacerle llegar la pelota, como pasaba con Fahnbulleh.
-Transitada la 1º Fase, ¿el objetivo sigue siendo el mismo de antes de iniciarse la temporada o se mira con mayor preocupación el tema del descenso?
-En mi cabeza está llegar lo más arriba posible y en este momento pienso solamente en Parque Sur, que es el primer partido en el horizonte. Queda muchísimo por recorrer y no hay que pensar en obligaciones de evitar caer en el último puesto o de ocupar tal o cual puesto para jugar el Play Off.
